Remedios caseros para corredores

¿Quién hubiese dicho que, en ocasiones, el «remedio de la abuela» pudiese funcionar mejor y con menos efectos secundarios que la medicina tradicional? Sin desmerecer a esta (la que, al fin y al cabo, nos salva la vida), os mostramos pequeños trucos naturales para que cuides tu salud.

 MEDIO MARATON ALCOY

Muchas veces, es surrealista pensar en las cosas que hacemos cuando corremos: nos ponemos bolsas de guisantes congelados en las articulaciones, nos damos friegas de líquidos inverosímiles y acudimos a remedios inútilmente ancestrales para dolencias comunes. Sin embargo, hay que reconocer que muchas veces el remedio casero es lo más efectivo.


 

1. ACEITE DE OLIVA

Además de para las ensaladas, en aquellos días en los que la temperatura desciende bruscamente, una pequeña capa de aceite aplicada sobre nuestros brazos, piernas y rostro servirá de protección ante el cortante frío del invierno.

 

2. VASELINA

  La semana anterior al maratón no puedes olvidar untar tus pies con bien de vaselina antes de dormir. Esto irá ablandando tu piel, al mismo tiempo que lubricará esta zona para evitar la aparición de llagas, ampollas u otras heridas.

 

3. ALCOHOL DE ROMERO

Frotar las piernas con este producto tras el entrenamiento puede aportar inmensos beneficios de relajación;nuestros músculos irán tranquilizándose paulatinamente de la forma más agradable.

 

4. EUCAPLITO

  Lo saben todas las abuelas del mundo y ahora, con las nuevas tecnologías, todos los runners pueden conocer la milenaria técnica de los vahos de eucalipto, que despejan las vías respiratorias y favorecen la expulsión de «cuerpos extraños».

 

5. TÓNICA

  Si has tenido algún calambre en las piernas, bébete una botella de tónica. La quinina (uno de sus componentes), introducida en un principio como remedio contra la malaria, tiene la capacidad de reducir la frecuencia e intensidad de los incómodos calambres.